La bielorrusa Marina Kress se ha incorporado al fin al equipo después de que no haya tenido ningún problema para entrar en España procedente de Bielorrusia. La pívot llegó por la tarde a Vilagarcía y a las ocho y media ya estaba en el pabellón del instituto de Carril para participar en el entrenamiento, lo cual causó una gran alegría en el cuerpo técnico y en sus compañeras, aunque especialmente a la propia protagonista

Marina Kress se incorporó ayer a los entrenamientos del Extrugasa luego de que pudiese entrar en España sin ningún problema procedente de Bielorrusia, algo que no pudo hacer la semana pasada desde Suiza.

De esta forma se pone fin al segundo culebrón protagonizado involuntariamente por la jugadora del este de Europa y que ha traído en vilo a la directiva en los últimos días, al igual que ocurriera antes de venir por primera vez a Vilagarcía. Ahora los problemas burocráticos parecen haberse solucionado definitivamente y la situación generada esta semana quedará para el recuerdo. La pívot bielorrusa salió a primera hora de la mañana de Minsk rumbo a Praga, ciudad en la que tomó el avión que le trasladó a Madrid y desde allí rumbo a Galicia para ser recogida por miembros del club. Isaac Fernández no se lo creyó hasta que la vio en el pabellón de Carril dispuesta a entrenar.

El entrenamiento de ayer fue especialmente alegre porque todos en el equipo lo han pasado muy mal desde que el viernes tuvieran que dejar sola a Marina Kress en el aeropuerto de Basilea. Ahora eso ya es pasado y todas están concentradas en el partido que mañana disputarán contra el BC Moscú y en el que esperan certificar la clasificación para la segunda fase de la competición europea.

J.L. CHANTRERO

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