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El Ciudad Ros Casares sucumbe ante el Spartak, que no desaprovecha la ventaja de
jugar en casa la final de la Euroliga El Ciudad Ros Casares Valencia perdió ayer ante
el Spartak de Moscú su primera Final a Cuatro de la Euroliga, en un choque que
controló el equipo ruso pero en el que el conjunto valenciano tuvo varias
oportunidades para darle la vuelta al encuentro, aunque no tuvo las fuerzas
necesarias para aprovecharlas.
La mejor de ellas llegó en el tercer
cuarto cuando, después de haber tenido una desventaja de quince puntos, llegó a
situarse a sólo uno de su rival, pero falló la oportunidad que tuvo para ponerse
por delante en el marcador y cambiar el guión del partido.
La buena
actuación de Elisa Aguilar, Laia Palau y, especialmente, DeLisha Milton Jones no
fue suficiente para doblegar el talento del conjunto ruso, que tuvo en las
estadounidenses Thompson y Whitmore y Taurasi a sus mejores jugadoras.
El
equipo valenciano saltó a la pista tranquilo y concentrado pese a tratarse de la
primera final de la Euroliga de su historia lo que, unido a una buena defensa,
le permitió controlar el ritmo y gozar de una primera ventaja (5-9, m.
4).
Pero apoyado por su publico, el Spartak no dejó que se le fuera el
partido de las manos, ajustó su defensa y eso le permitió correr el
contraataque, una situación que puso por primera vez contra las cuerdas al Ros
Casares.
La salida a la pista de Palau y Ferragut reactivó el ataque del
conjunto español y la presencia bajo su aro de Dydek complicó la anotación del
conjunto ruso, pero cuando el Ros Casares le acechaba en el marcador, su falta
de acierto desde la línea de triple le impidió completar su remontada.
El
castigo fue doble, porque en cuestión de tres minutos dos triples casi
consecutivos de Thompson, uno más de Taurasi y una canasta de Bird elevaron la
ventaja local hasta los quince puntos (35-20, m.17). Pero el Ros Casares no se
hundió y entre Palau y Aguilar consiguieron frenar la caída de su equipo y
recortar su desventaja (38-26, m.20).
El descanso le sentó bien al Ros.
Su intensidad defensiva mantuvo sin anotar casi cuatro minutos al Spartak, lo
que le dio la confianza necesaria para aumentar su frecuencia anotadora y para,
con el tercer triple de Elisa Aguilar, volver a meterse en el encuentro (40-36,
m.24).
Acierto en los tiros libres
El conjunto
local trató de cortar el ritmo español con un tiempo muerto, pero sólo conseguía
frenar a Milton Jones con faltas personales y la estadounidense se mostró
certera desde la línea de tiros libres (42-43, m.28).
Pero, de nuevo, el
Ros Casares no supo rematar su trabajo. Erró el ataque que le hubiera permitido
ponerse por delante, su confianza se resquebrajó totalmente y, en dos minutos,
el Spartak aprovechó para recuperar su colchón (54-44,m.30).
Aún así, con
los puntos de Milton Jones, el Ros Casares volvió a situarse a cinco puntos de
distancia pero esta vez Thompson no dejó que el equipo valenciano creyera en el
milagro, aprovechó que su compatriota del Ciudad Ros Casares fue eliminada a
falta de tres minutos, y junto a Taurasi condujo a su equipo a la victoria
final.
lasprovincias.es
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