Y seguramente no la última... Aún hoy, dos días después de haber visto mi primer partido de Liga Femenina en "vivo" (Un Ros vs. UB, ¡vaya estreno!), intento digerir o al menos asimilar todo lo que me aconteció en tan poco tiempo.

Desde el pasado agosto, mediado el mes, en un pueblecito muy lindo de la provincia onubense llamado Ajaraque, venía planeando el ir a Valencia el día 21 de octubre de 2006 para ver el partido que enfrentaría al Ciudad Ros Casares Valencia y al Universitat de Barcelona F.C. Barcelona, pero diversos sinsabores que rondaron mi cabeza alejaban por momentos la idea renegándola al olvido. Finalmente la "coherencia" y el "valor", se aunaron y el mismo sábado 21 me levantaba a las siete de la mañana para coger el tren que haciendo una escala imprevista en Madrid me llevaría hasta Valencia desde mi Cordobita natal.

Imprevistos varios, catorce horas de tren (ida y vuelta, ésta, pensando como relatar lo sucedido), unos ahorrillos por ahí; pero puedo asegurar que ver un partido de Baloncesto Femenino con LOK@S, ¡¡¡No tiene precio!!!

Llegué a la Fonteta y me pareció el pabellón de deportes más maravilloso del mundo (¿Qué queréis? Mi poco mundo viene a ratificarlo...) Cual niño de cinco años que ansia la llegada de Reyes o el circo a la ciudad, no cabía en mí de gozo. Allí estaba yo, con mi humilde pancartita en el bolso que tenía vergüenza de mostrar. ¡Y vaya si se mostró! Hubo hasta quien se dio cuenta de que aquel día había algún que otro cordobés en Valencia.

Partidazo. Un UB que me gusta mucho, no me preguntéis porque, pero el cuidado por el baloncesto femenino se nota especialmente en Catalunya. Y un Ros que ojalá obtenga triunfos europeos, porque espero que sea un equipazo. Estrellas desde luego tiene.

¿Ya está? ¿Nada más que decir de uno de los mejores partidos del año? ¿Qué más decir? Si hubiese faltado una sola de las personas con las que compartí esas horas este fin de semana, por muy buen partido que fuese, no hubiera sido lo mismo. Porque para mí, por encima del deporte, que es algo excepcional están las personas, que lo son aún más, y la amistad. Quizás el mayor de los valores. Y de nuevo vuelvo a dar las gracias porque en mí, se cumple aquello que se dice en la editorial de esta página. Yo he tenido el maravilloso placer de volver a hacer nuevos amigos, y reunirme con los "viejos" gracias a esta pasión común que nos embarga a todos que es el Baloncesto Femenino. Yo, una simple mortal entre el resto, se ha sentido la persona más especial del mundo por "Mil besazos y suerte", las sonrisas más bonitas y muchas palabras de aliento. De nuevo GRACIAS. Me reitero en que "todo el mundo que conozco relacionado con esto es estupendo". GRACIAS AMIGOS, porque creo que jamás podré olvidaros. No estábamos todos los que somos, faltaban, pero sí que éramos todos los que estábamos.

Y es que esta gente de LOK@S hace que recuperes las ganas por querer vivir, que quieras llorar de alegría y que no dejen de temblarte las manos, entre otras cosas. Sois grandes muchachos.

¿Y las jugadoras? También. Afortunado aquel que sea amigo de alguna de ellas, porque ser amigo de cualquiera de estas jugadoras tiene que ser un verdadero tesoro. LAIA PALAU es simplemente, LAIA PALAU, es que no tengo ni palabras para describirla. Alguien que puede hacer que desees con todas tus ganas ver un partido de baloncesto esperando un pase de ensueño suyo. Elisa Aguilar, una de las mejores bases del mundo, ¿verdad Esther? Marta Fernández, una trabajadora y luchadora nata, aunque a algunos les pese. Y Marina Ferragut otra, y aún, más simpática que alta. Schumacher y De Souza dos pivots "enormes", calidad extradeportiva. Doña Elena, alguien que es capaz de decirte: "Sé mejor que yo". Margo Dydek más "maja" que centímetros tiene. Milton la mejor cuatro del mundo, y  para mí, Pons. Gallego, otro crack. Y Freixanet uno en potencia. El resto, grandes jugadoras. Pero mi debilidad  hace que yo me quede con vosotros, LOK@S.

A Nacho porque es posible querer a alguien sin "conocerlo" y porque he redescubierto que la bondad existe en este mundo aunque a veces se nos oculte. A Carlos porque yo sin tener hermanos, siento que tengo varios y porque entre otras grandes lindezas me regaló la cámara de fotos más valiosa que existirá. A Rubén por presentarme a sus amigas y querer que estas también lo sean mías. Canarias es grande, aunque sólo fuese por tí. A Esther por recordarme de dónde soy y aportar el punto de simpatía a la conexión andaluza. A Llanos porque es simplemente estupenda. A Eva, por todo, pero especialmente por esa carrera hacia la estación que me llegó al alma. A Txeumi por enseñarme baloncesto y a Fhivy por su cariño. A las dos por mostrarme que la vida es bella. A Merche porque es la mejor y ella lo sabe (he podido comprobar que lo que me dijo es verdad: "Cada uno te da algo para que te vayas volviendo mejor"), y tiene la hermana más maja del mundo mundial, a cuidarla.

Y resumiendo, a todos, porque cada vez que me regaláis una sonrisa me hacéis el mejor regalo que se puede hacer a alguien. Y cuando digo todos, me refiero a todas las personas que conozco y que quiero relacionadas con este deporte, la gran parte de ellas, LOK@S. Por recordarme que si te caes siete veces te levantas ocho, y que la vida puede ser realmente maravillosa. Hasta pronto. AguR. 
 

P. D: Para el anecdotario quedará el sabor de un "pastelito cordobés", un himno peculiar, álbum de fotos variado y preciosos recuerdos, preguntad por ellos. 
 

María Baena Castilla

CÁRBULA