São Paulo / Brasil - Australia consiguió su primer título mundial el sábado con un triunfo por 91-74 sobre Rusia. Justo cuando las jugadoras de Igor Grudin creían que habían saltado su mayor barrera con una sorpresa en semifinales contra los Estados Unidos- el equipo que las había derrotado en las dos últimas finales del campeonato del Mundo - fueron serradas por las Down Under.

Finalistas derrotadas en los dos últimos Juegos Olímpicos por el equipo estadounidense, las Ópalos viajaban a Brasil decididas a conseguir el Oro y consiguieron la gesta a lo grande, contra Rusia, con Pehhy Taylor explotando con 28 puntos.

La gloriosa carrera de Australia en el Campeonato del Mundo Femenino de la FIBA tuvo un poco de todo.

Empezaron con un victoria tras  una penalización a  Lithuania, que había tenido problemas para llegara a Brasil desde la Guyana Francesa, y las Ópalos sobrevivieron por poco contra España en la segunda ronda y a Brasil en la semifinal, antes de conseguir la última con una sorprendentemente fácil triunfo, por 17 puntos de diferencia, sobre Rusia para conseguir el Oro.

Taylor estuvo sensacional desde el principio en Brasil, convirtiéndola  sus esfuerzos en los últimos dos partidos en la elección obvia para el premio como Mejor Jugadora del Torneo.

Fue la máxima anotadora del partido en la semifinal con 26 puntos.

Rusia tuvo un prometedor comienzo y ganaba por 9-2, pero las  Aussies empezaron a calentarse. Un triple de Jenny Whittle culminaba un parcial de 8-0 para el 10-9, mediado el primer periodo.

Después de una canasta de Maria Stepanova, ponía a Rusia de nuevo por delante, Taylor golpeó con un triple y Australia recuperó la delantera con el 13-11.

Una suspensión de Olga Arteshina puso de nuevo a las europeas al frente con el 15-13, pero esa sería su última ventaja.

Belinda Snell, cuya increíble actuación con 22 puntos fue crucial para las Ópalos contra Brasil dos días antes, clavó un triple para activar un 11-0 parra una ventaja de 24-15.

Rusia consiguió recortar el déficit a seis, con el  26-20 pero una entrada de Lauren Jackson inició otro parcial, esta vez de 11-0, y Australia se puso por delante 37-20.

El equipo de Igor Grudin luchaba como tigresas para volver al partido y cuando Tatiana Shchegoleva anotó desde la parte de atrás, perdían contra las gigantes de Oceanía por 43-35 al descanso.

Las australianas empezaron la segunda parte incluso más fuerte, y cuando Snell clavó sus segundo triple del día, la diferencia había aumentado hasta el 53-37, quedando 7:16 del tercer cuarto.

Una suspensión de Ilona Korstin puso a  Rusia  70-60 al principio del último cuarto, pero el equipo de Jan Stirling nunca estuvo bajo una seria amenaza el resto del partido.

Como equipo, Australia anotó muy bien desde la larga distancia, anotando 9-de-22 (41%).

Superaron a Rusia 38-27 al rebote, mientras Taylor y Jackson recogían nueve rebotes cada una.

Kristi Harrower aportó pruebas adicionales de que está entre las mejores bases del mundo, anotando 15 puntos, repartiendo cinco asistencias y muy importante, elevando el tempo para las Aussies.

Jackson consiguió 16 puntos.

Las rusas metieron 6-de-17 (35%) en triples, pero dentro del arco hicieron un  22-de-52 (42%) comparado con el 23-de-38 (61%) de Australia.

Stepanova consiguió 17 puntos y 13 rebotes para Rusia.

Por Jeff Taylor, exclusivamente para  FIBA

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Traducido por Miguel Bordoy