El técnico leonés, Miguel Estrada, había avisado durante toda la semana que el encuentro frente al Universitario de Ferrol era un «partido trampa». Sus pupilas no hicieron caso a sus arengas y así, claro está, cayeron en la trampa urdida por las gallegas, mucho más ambiciosas que el equipo leonés. Sin embargo, las leonesas gracias a la calidad de la sevillana Isa Sánchez y a la garra de la norteamericana Tracy Reid lograron remontar una renta adversa que llego a ser de 17 puntos (19-36) cuando se enfilaba el minuto 15 del encuentro. Se pusieron, incluso, tres puntos arriba a tres minutos del final (58-55) gracias a un 'triple milagroso' de una errática Iciss Tillis. Pero ahí se acabó todo.

Por justicia merecía ganar el Universitario de Ferrol y los 'dioses' obraron el milagro para unas gallegas que apenas soñaban con ganar en León un par de horas antes del inicio del encuentro. Con el mencionado 58-55, la desconcentración se apoderó, de nuevo, de la escuadra de Miguel Estrada. Un par de errores garrafales de marcaje permitieron dos bandejas fáciles a María Vilouta que ponían, otra vez, en franquicia a su equipo (58-59). La 'gigante' Svetlana Rodionova, a la que se temía mucho en León, se encargó de poner el 58-61 a poco más de un minuto para el final del choque.

Entonces, las huestes leonesas se aferraron sólo al tiro de tres puntos para empatar el choque. En poco más de medio minuto hasta cinco triples erraron las leonesas para forzar la prórroga. Primero Mar Rovira, en dos ocasiones, vio como el aro 'escupía' su lanzamiento, luego Luci Pascua fallaba bajo canasta y, por si fuera poco, todavía llegaron tres lanzamientos errados más por Isa Sánchez, la propia Mar Rovira y la norteamericana Iciss Tillis, que no pudo reeditar el lanzamiento de tres puntos que puso en franquicia a su equipo apenas dos minutos y medio antes.

Esta fue la puntilla para el equipo leonés, ya que la última posesión correspondió a un cuadro gallego que, de nuevo, aprovechó una 'contra' de María Vilouta para poner el definitivo 58-63. Una derrota que duele y mucho en el seno del Acis Incosa por cuanto se trataba de uno de esos partidos en los que, por calidad y por equipo, siempre tiene la obligación de vencer. Ayer no hubo robo arbitral como hace nueve días contra el Ros. Ayer se robaron ellas mismas. Que viene el lobo, avisaban. Y al final vino

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