Una canasta de Carla Fernández, a cinco segundos para la conclusión de la prórroga, decantó la victoria para el Arxil en el derbi provincial ante el Celta Selmark, en lo que fue el último partido del año. Viguesas y pontevedresas jugaron un buen partido ayer en Navia, un pabellón que registró la mejor entrada de la temporada y que vibró con los segundos finales del encuentro. En los primeros minutos del partido, todas las miradas estaban puestas en el duelo que tenían bajo los tableros Minata Keita y Maimouna Diarra. La céltica se imponía con autoridad en el derbi particular, y si a ello unimos la buena marca de Marta Canella sobre Fallon Lewis, es fácil explicar por qué el Celta Selmark ganaba por ocho puntos de ventaja, 10-2, a tres minutos para la conclusión del primer cuarto.

La entrenadora del Arxil, Teresa Méndez, encontró la solución sentando a las dos jugadoras y poniendo en pista a Ana María Román y a María Centeno. La primera le dio consistencia al juego interior, la segunda le imprimió una velocidad al juego que le permitió a su equipo recortar la desventaja y finalizar el cuarto con un punto de ventaja.

Arxil se colocó en una zona al comienzo del segundo cuarto, y Carlos Colinas protegió a Keita en el banquillo con dos faltas personales. Parecía el principio del fin, ya que las vigueses se atragantan ante una defensa zonal, pero en esa ocasión la realidad fue otra muy diferente.

El acierto de María Araújo y Marta Canella le permitió al Celta Selmark aguantar el empuje del Arxil. Diarra volvía a la pista y se encontraba más cómoda al no estar enfrente Keita, que durante todo el segundo cuarto no jugó ni un solo minuto, consciente el entrenador vigués que el partido se resolvería en los instantes finales.

Tras el paso por los vestuarios, el comienzo del tercer cuarto se convirtió en una locura, con lanzamientos forzados, pérdidas de balón y una esquizofrenia que no beneficiaba a nadie y, cuanto menos, al desarrollo del encuentro. Diarrá seguía sin "meterse" en el partido y vuelve al banquillo. El Celta Selmark logra una ligera ventaja en el marcador, pero el Arxil defiende muy arriba tras perder el balón con la clara intención de que el equipo vigués no juegue con velocidad, ya que cuando conseguía recuperar el balón la única palabra que se escuchaba en el pabellón de Navia era la de corre, corre.

Las buenas sensaciones mostradas por el Celta Selmark el pasado fin de semana tuvieron continuidad ayer, y a tres minutos para finalizar el periodo Marta Canella anotaba un triple que ponía a las viguesas con ocho puntos de ventaja. El partido estaba tan igualado que Carlos Colinas volvió a optar por proteger a Minata Keita sentándola en el banquillo. El equipo estaba en una buena dinámica un minuto más tarde ganaba por ocho puntos de ventaja, 54-46.

El Celta Selmark llevaba bien el partido, pero en los últimos diez minutos de juego el partido dio un giro inesperado. Arxil sabía que para llevarse la victoria tenía que dar un paso adelante y todo pasaba por defender al máximo, incluso por encima de lo permitido. Diarra asumió los galones en ese momento, nivelando la lucha con Keita, y al ver que se le permitíaprácticamente de todo consiguió sacar del partido a la viguesa que comenzó a perder balones.

Esa situación consiguió desestabilizar al conjunto vigués, que a cinco minutos para la conclusión del partido se veía por detrás en el marcador. A partir de ese instante cada balón se peleaba hasta la extenuación. Las alternativas en el marcador eran constantes, pero también se acumulaban los fallos, no moviéndose el marcador en los dos minutos finales del partido.

Las cosas no cambiaron demasiado en el tiempo extra. El conjunto vigués consiguió tres puntos de ventaja a dos minutos para el final, pero las sensaciones ya no eran las mismas. Arxil había crecido en defensa, mientras que al Celta Selmark le habían entrado las dudas.

En esos segundos finales apareció Carla Fernandez, que fue capaz de anotar los seis últimos puntos de su equipo. La última canasta a cinco segundos para la conclusión, dejando al equipo vigués sin opciones para poder a empatar el encuentro