Al Al-Qazeres le pesó su escaso acierto ofensivo, aunque tuvo la última pelota para forzar la prórroga. Afure Jemerigbe encabezó la reacción cacereña frente a un Bembibre que solo fue un poco mejor

Espabiló demasiado tarde el Al-Qazeres, derrotado por el Embutidos Pajariel Bembibre (49-52) en un partido en el que no supo salir del lodazal de su pésimo juego ofensivo hasta los últimos tres minutos.

Con Afure Jemerigbe como heroina, el equipo local tuvo incluso el último balón para empatar, pero el triple forzado de Callan Taylor no tocó aro. No pasa nada por perder, aunque sea la tercera consecutiva, porque al equipo le queda mucho margen en la lucha por la salvación, pero hay que mejorar considerablemente de cara al aro rival.

A un entrenador como Jacinto Carbajal, minucioso y exhaustivo a más no poder, no le viene nada bien afrontar partidos con tan poco margen de tiempo. Seguro que los resultados y el juego mejorarán cuando el calendario registre un solo encuentro semanal. Hubo otros factores, destacando la excesiva ansiedad de las locales.

La primera parte resultó infumable. Fallos, fallos y fallos. El baloncesto femenino es a veces de poca anotación, pero fue excesivo. Los porcentajes resultaron bajísimos.

El arranque en sí ya fue frío. El Al-Qazeres consiguió su primer acierto pasados dos minutos. Las rotaciones tampoco aportaban más que las titulares, aunque Jemerigbe, centro de muchas miradas, encestó nada más salir. No haría nada más positivo hasta después del descanso.

Un triple de Vero Sánchez puso la primera ventaja cacereña (12-11, min. 8), pero la iniciativa al final del cuarto sería visitante (14-16). El apagón le llegó entonces al Bembibre, lo que permitió que el Al-Qazeres lograse un pequeño margen (22-18, min. 14) antes de estar cuatro minutos sin clavar un solo tiro. A cámara lenta, el choque llegó igualado al intermedio. 24-24: un horror.

Un par de datos. El equipo extremeño tiró 29 veces a canasta y acertó 10 y su oponente, 35 y 11. También se sumaron 20 pérdidas (12 y 8, respectivamente).

SEGUNDA PARTE Al encuentro se le puso un poco de mejor cara tras el paso por los vestuarios, más por la emoción que por la leve mejoría del flujo ofensivo. De hecho, el equipo de Jacinto Carbajal solo lograría 9 puntos en el tercer cuarto. Destacaron los balones que se le salieron casi de dentro a Lady Comfort.

Un pequeño estirón del Bembibre le dio su máxima ventaja (33-39) para encarar los últimos diez minutos.

La empanada continuó para las cacereñas y las luces rojas se encendieron faltando cinco minutos (39-48). Fue entonces cuando Jemerigbe se puso la capa: dos triples y dos tiros libres suyos le dieron vida al partido ante la estupefacción del Bembibre y un ambiente muy caliente.

Andrea Vilaró, con otro lanzamiento lejano, dejó el 49-51 a falta de 25 segundos. Esther Montenegro respondió con un tiro libre y en la última posesión, Taylor no tuvo más remedio que tirar en mala posición porque tenía que evitar que le hiciesen falta (el Bembibre no estaba en bonus ). No entró.

No hay que olvidar que el oponente fue cuarto la pasada temporada. Queda mucho aún y todos tienen que mentalizarse cuanto antes que la salvación no se conseguirá sin sufrimiento

AL-QAZERES EXTREMADURA: Carla Nascimento (5), Andrea Vilaró (7), Marta Tudanca (0), Callan Taylor (7), Lady Comfort (4) --cinco inicial-- Afure Jemerigbe (13), Yaiza García (8), Vero Sánchez (5).

PAJARIEL BEMBIBRE: Anna Gómez (10), Rosó Buch (6), Dita Lipekalne (5), Verónica Matoso (2), Orla O'Really (4) --cinco inicial-- Esther Montenegro (13), Elisabet Vivas (0), Berta Chumillas (3), Ariel Edwards (9).

MARCADOR POR CUARTOS: 14-16, 24-24 (descanso), 33-39, 49-52.



Javier Ortiz
elperiodicoextremadura.com













Embutidos Pajariel Bembibre PDM consiguió un importante triunfo ante el Club Baloncesto Al-Qazeres Extremadura en un encuentro marcado por las fuertes defensas y la escasa anotación de uno y otro equipo. Un partido muy igualado que las bercianas rompieron en la recta final del tercer cuarto, consiguiendo seis puntos de ventaja que fueron decisivos.

El encuentro comenzó con dos equipos muy intensos en defensa, que intentaban no dejar hacer al rival. Pese a los problemas de Bembibre para anotar, las de Chiqui Barros lograron llegar igualadas al final del segundo cuarto. Tras el descanso los dos equipos siguieron presionando en defensa y perdiendo muchos balones en ataque, donde la presión del rival y la precipitación llevaban a unas y otras a fallar multitud de lanzamientos.

No fue hasta los compases finales del tercer cuarto cuando un nuevo arreón sembraba la emoción. Esta vez fue Bembibre quién tomó el mando y se mostró mas acertado en la pintura. Tal y como estaba el partido la ventaja de las bercianas podía ser definitiva, lo que quedó aún mas claro en el inicio del último cuarto. Bembibre tenía claro que ahora había que defender mejor que nunca, y así lo hizo para ir consolidando su ventaja y hacerse con el partido