 Un bucle, éste del mes de octubre, del que parece vislumbrarse el fin, pero en el que aún nos encontramos inmersos de lleno. Y, en esta ocasión, tras partido ha tocado entrenamiento y, mañana, viaje, como una repetición de lo ya vivido la semana pasada. Y es que, además de un calendario completito para todos en este mes inicial, el destino ha querido que nuestras primeras salidas a domicilio no sean, precisamente, visitas vecinales, con lo que el tiempo de baloncesto se limita a los encuentros y a un entrenamiento de preparación.
La costumbre, lo usual en las jugadoras, es descansar tras día de partido, eso ya sabíamos que sería imposible con este arranque de Liga, pero es que además, lo inusual es tener que hacer en la sesión de post-partido, el entrenamiento de plan de partido, traducido: el intenso, el que vale para preparar el encuentro siguiente. Así tocó la semana pasada y así ha tocado hoy. Con el cansancio lógico tras el partido de ayer, era turno de saltar a la pista en esta tarde para olvidar lo sucedido hace 24 horas y empezar a pensar en lo que vendrá el sábado en tierras gallegas ante Uni Ferrol.
Por eso, en la sesión de más de hora y media de duración, tocaba condensar, con repaso, pinceladas de lo que se va a poner en práctica en Ferrol y mucha, mucha intensidad. Está prohibido tomarse un minuto de relajación, de descanso (aunque sea tras un encuentro), y así ha vuelto a quedar patente. Ejercicios de 4 por 4 (aprovechando que hoy ha subido la Júnior Clara Hernández y eran 12 jugadoras) y de 5 por 5, y competitivos para ir "ensayando". Las molestias siguen presentes, aunque todas han completado la sesión sin problemas. Mañana, viaje hasta Ferrol.
PERFUMERÍAS AVENIDA
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