El Gernika demostró tener mayor capacidad que el cuadro ferrolano durante un partido que, a pesar de que discurrió igualado durante los dos primeros cuartos, poco a poco fue evidenciando la superioridad de una escuadra que mostró un mejor estado de puesta a punto para la competición liguera que comenzará a mediados del mes de octubre que acaba de estrenarse.

La igualdad fue la característica principal del partido hasta que quedaban tres minutos para el llegar el descanso del encuentro. Ese fue el momento en el que el cuadro vizcaíno apretó y cobró una renta de diez tantos ante una escuadra que se vio impotente para frenar el vendaval de juego de su rival, apoyado sobre todo en el potencial de un juego interior en el que Brittany Miller, ex del Universitario, fue una de las más destacadas de las suyas.

El equipo vasco, con su ventaja asentada en torno a los diez puntos, no perdió el control del partido en lo que quedaba del mismo, a pesar de los intentos de la escuadra ferrolana. El Universitario, sin embargo, apenas fue capaz de bajar de esa barrera psicológica y, de esta manera, recuperar opciones de luchar por la victoria final, así que los minutos fueron pasando sin que el equipo ferrolano pudiese hacer nada para evitar la derrota.

Ahora, el fin de semana, su próximo compromiso llegará con motivo de la disputa de la Copa Galicia, en la que se va a enfrentar al Arxil de Pontevedra, al que ya se impuso este verano