Tal y como esperaba el cuerpo técnico después de haber estudiado en vídeo la evolución de Nadezhda Orenburg en las últimas semanas, este equipo es una versión ampliamente mejorada del que visitó el Cerro del Telégrafo en la primera vuelta de la Euroliga, encajando 90 puntos para perder ante Rivas Ecópolis. De la mano del nuevo entrenador George Dikeoulakos y con la llegada de una jugadora interior como Glory Johnson Nadezhda se ha convertido en un bloque mucho más sólido y duro en defensa. La pívot norteamericana por sí sola ya supone un factor de calidad para el conjunto ruso, y en este partido se ha marchado hasta los 19 puntos y 11 rebotes.

Quien es una de las leyendas de Rivas Ecópolis, Anna Cruz, es otra de las jugadoras a las que les ha sentado bastante bien el relevo en la parcela técnica. Anna Cruz, siempre polivalente, está añadiendo una faceta más a su juego y en este Nadezhda acumula muchos minutos en la posición de base, alternando en ocasiones posición con Natalia Zhedik, jugadora que por su altura -1'84- y su buena mano, puede aprovechar los espacios que se le aparecen al ceder las labores de dirección del juego. Con la ex ripense llevando la manija del partido Nadezhda salió con más fuerza al partido, mostrando un enorme acierto en los primeros minutos que obligó a José Ignacio Hernández a pedir un tiempo muerto para cambiar el guión del partido, con 13-6 en el marcador. Y el parón surtió efecto, las ripenses ajustaron líneas y se soltaron en ataque, mención especial para una valiente Gaby Ocete que tomó responsabilidades y volvió a superar, por tercera vez en los últimos cinco partidos, las dobles figuras anotadoras. Así, al final del primer cuarto el marcador era de 19-16.

Las de José Ignacio Hernández lograron ponerse por delante al comienzo del segundo cuarto, 19-20 tras dos tiros libres de Rachel Allison. Pero ahí comenzó a funcionar la variedad del catálogo local, que apretó para lograr un buen parcial, incluyendo triples de Zhedik y Kuzina y la presencia interior de Johnson. Con 33-23 era obligatorio pedir otro tiepo muerto, y las ripenses lograron frenar la sangría, pero eran malos momentos para apelar a la épica y a Laura Nicholls le cayó la tercera falta personal con aún varios minutos por jugarse en la primera parte, complicando aún más la empresa. Un triple de Kuzina dejó el luminoso en 43-29 al descanso.

La única opción era apretar los dientes y no perderle la cara al partido, y lo que ocurrió fue que Rivas Ecópolis completó su mejor cuarto en el tercer acto. Un triple de Gaby Ocete obligó a Dikeoulakos a parar el partido, con 47-35, pero la defensa de las de Hernández mostraban la mayor efectividad de todo el partido. Allison, con menos peso que en otras ocasiones, hizo su único triple del partido para romper la barrera de los diez puntos en los estertores de este cuarto, 51-42, pero ahí llegó la última postal positiva por parte de Rivas Ecópolis. Porque el último cuarto fue netamente local. Anoikina se hacía fuerte en la pintura para abrir fuego, y José Ignacio Hernández pedía un tiempo muerto tempranero sospechando lo que podía llegar, después de un intercambio de fallos. Esta vez no surtió efecto y Anna Cruz comenzó a liderar el arreón definitivo para Nadezhda, un parcial de 15-2 en el que sólo Laura Nicholls fue capaz de mancillar el aro rival. Glory Johnson ampliaba su cuenta estableciendo una diferencia de 20 puntos, que aún crecería más a favor de un equipo espoleado por el animoso público ruso.

Esta es la cuarta victoria consecutiva en la Euroliga de un Nadezhda en claro ascenso, mientras que Rivas Ecópolis se queda con un balance de 3-5 con cuatro jornadas por delante. La próxima semana llega BLMA Montpellier al Cerro del Telégrafo en un partido en el que los play-offs estarán decididamente en juego. Pero antes toca ponerse el chip de la Liga Femenina y defender la segunda posición el próximo sábado ante Mann Filter.

Próxima cita: LIGA FEMENINA Rivas Ecópolis - Mann Filter Zaragoza. Sábado 25 de Enero, 19:30 horas. Pabellón Cerro del Telégrafo

"Este era un partido particularmente difícil para nosotros. Le damos todo el crédito a Nadezhda por la victoria. Tenemos un equipo bastante joven y en ocasiones nos resulta duro competir con equipos con más experiencia en sus filas tanto en la Euroliga como en sus competiciones nacionales. Sin embargo, creo que jugamos un buen partido y logramos crear juego ante sus jugadoras interiores. Desde nuestro primer enfrentamiento con Nadezhda en España creo que ellas han mejorado mucho en defensa y han conseguido que jugar contra ellas resulte mucho más difícil".

"Conocíamos el tipo de juego de Nadezhda, estábamos preparadas para hacerle frente, pero no esperábamos que nos hiciesen tanta presión. Ganamos el partido en nuestra cancha y pensábamos que podríamos hacerlo de nuevo en Orenburg, pero desafortunadamente esta vez no pudimos jugar como entonces. Tenemos que aprender de nuestros errores y prepararnos para los siguientes partidos".