Aunque las diferencias son muchas en presupuesto, potencial, aspiraciones..., la competición ha dejado, tras dos meses, al Universitario y al Mann Filter Zaragoza prácticamente equiparados en la cola de la tabla. Las ferrolanas con esa única victoria, lograda ante Cadì La Seu, a la que se aferran para convencerse de que la salvación es posible; y las zaragozanas, con un cero en la clasificación, sangrante para un equipo confeccionado para luchar por objetivos mucho más altos Y, después de recambiar a sus rectores en el banquillo hace apenas dos semanas Pedro Martínez sustituyó a Álex Cebrián en el maño y Miguel Maseda a Armando Otero en el ferrolano, ambas escuadras están, también, en período de reconstrucción. Ahora, queda saber si el atisbo de mejoría que el Universitario exhibió hace ocho días en la segunda parte de su partido ante el Jopisa Burgos es síntoma de su repunte de juego y en sus resultados; y si el conjunto zaragozano habrá despertado ya ante los cambios que se avecinan: la marcha de la norteamericana Kristen Mann y la llegada de la balcánina Zana Lelas, así como la incorporación de varios refuerzos. Y es que, visto lo visto y con los fajos de billetes que guardan las arcas del cuadro maño, casi es una suerte cogerlo antes de una revolución inminente y que, a buen seguro lo hará subir en los próximos meses. No en vano, cuenta con buenos cimientos y jugadoras teóricamente válidas para la categoría como Paula Palomares, la excéltica Cindy Lima, Rasmussen el año pasado en Cadì o la griega Maltsi. La jugadora helénica está siendo, de largo, la mejor apuesta del Mann Filter, sin embargo, al igual que todo el equipo, la irregularidad está siendo su cruz. Y entre tanto desengaño, la más afectada, la que fue base del Universitario Sofía Ramalhaho, gran damnificada del pésimo arranque de la escuadra aragonesa. Fallos > Falta de intensidad, poco acierto, demasiados errores... Universitario y Mann Filter han compartido males en estas primeras jornadas. Sin embargo, el técnico ferrolano, Miguel Maseda, confía en que, a pesar de las carencias físicas de su equipo Elena Sánchez no viajó, Elvira jugará con una máscara protectora en su nariz y Vrantcheva y María Vilouta sufren pequeñas molestias desde el accidente de ayer, el grupo ferrolano saque partido de una de las contiendas más asequibles de su futuro inmediato. El camino para lograrlo lo marcaron ya en los últimos cuartos del choque ante Burgos: morder en defensa y tener paciencia en ataque. Pero, sobre todo, recuperar la confianza y fortalecer mentalmente a un equipo muy tocado. Y, con las jugadoras de perímetro en más o menos buen estado, el rendimiento bajo tableros de Moore, Elvira Fernández y Becanovic podría ser su último partido en la entidad ferrolana marcará en buena medida el desarrollo de la contienda diariodeferrol.com |