--Han vivido un regreso muy intenso.
--Ayer (por el domingo) fue un día ajetreadillo. Apenas dormimos. Salimos del aeropuerto de Orchies a las seis de la mañana y a las dos de la tarde llegamos a Madrid. Después nos fuimos a comer al Txistu, acudimos a la Puerta del Sol para recibir el homenaje de los aficionados y después comenzó la rueda por los medios de comunicación.
--¿Regresa hoy a Zaragoza?
--De momento tardaré en regresar a mi casa. Me voy a quedar unos días en Madrid.
--¿Ya sabe dónde se va de vacaciones?
--Me voy a la playa, a la montaña y a Zaragoza para estar un poco con los papis.
--¿Cuál fue la clave del oro?
--Mantener nuestra filosofía y controlar lo que hacen bien las francesas. Bloquear su rebote para que no corriesen.
--¿Pensó en algún momento que perdía España el partido?
--Fue un choque de rachas. Nos íbamos en el marcador, nos volvían a coger. Se iba a decidir en los minutos finales y así fue. Ellas tuvieron el balón para empatar si metían un triple. Pero lograron solo dos puntos y ganamos. Fue genial.
--Su semifinal frente a la Republica Checa fue increíble.
--Me vi más fuera que dentro de la selección. En mi posición de base no tenía sitio. Me dieron la oportunidad de ser escolta y todo fue perfecto. Pese a los pocos minutos, no tenía ningún motivo para estar con mala cara, sino para estar muy feliz, apoyar al equipo y el día que me necesitaran, demostrar que también podía estar al nivel del resto.
--También acudió su excompañera en el Filter Queralt Casas.
--Estaba igual que yo. Es una jugadora joven que debutaba en la selección absoluta.
--¿Qué destacaría de Mondelo y Lapeña, los entrenadores?
--Mondelo triunfa donde va. En China, en Salamanca y con las categorías inferiores de la selección ha ganado y ahora se ha llevado le oro. La labor de Lapeña igual no se ve en el día a día. Duerme poco y siempre estudia a los rivales. La gente que estamos dentro sabemos que se lo curra muchísimo.
--Siendo novata, todo han sido buenas noticias para usted.
--Hay que seguir mejorando porque las generaciones jóvenes vienen muy fuertes. Si te relajas, viene una y te quita el puesto.
--¿Qué es lo que ha aprendido jugando en el Wisla Cracovia?
--A nivel deportivo me he sabido levantar sola en los momentos duros, puesto que no tenía a la familia, ni a los amigos cerca. A nivel personal me he valido por mí misma. He crecido mucho en lo deportivo y personal.
--¿Sigue el básquet zaragozano?
--Mis padres van a ver siempre al Casablanca y yo estaba bastante puesta. Sé que han hecho una grandísima temporada y me alegro que puedan salir en Liga Femenina porque Zaragoza lo merece y hay afición y gente que trabaja en coles y clubs.
--¿Le gustaría volver a jugar en Zaragoza?
--Zaragoza es mi ciudad y me encantaría volver a jugar allí. Pero la Liga Femenina ha bajado mucho de nivel. Ahora quiero jugar la Euroliga. ¡Ojala Zaragoza juegue en el futuro esta competición y regrese a casa!
R. MARTÍ
elperiodicodearagon.com