Victor Lapeña repasa su temporada en Salamanca culminada con un título de Liga inolvidable por el significado personal y  colectivo y por la extraordinaria manera en que se produjo. Meses de emociones concentrados en un interesante decálogo

1. ELIMINAR TODA LA TENSION DEL GRUPO: Cambiando el LENGUAJE DEL GRUPO hablando sólo de lo bueno, a partir de algo que todos creemos que funciona bien

2. CREAR UN CAMINO INTERIOR : Cada persona de este grupo ha de mirar dentro de si misma, ahí está la solución, y hacer de ese CAMINO EL DEL ENTRENADOR.

3. CREAR DISCIPLINA DE MANERA NATURAL Y EVITANDO LA FALTA DE RESPETO ENTRE NOSOTROS : Se crean dinámicas positivas dentro y fuera del campo y sobre todo en la Cancha no hay culpables

4. ASUMIR RESPONSABILIDADES A PARTIR DE ESTE MOMENTO: Debemos ganar siempre el siguiente partido, somos quien somos y debemos asumirlo.

5. ¿Qué hacer para ganar? Creación de un MÉTODO DE TRABAJO  basado en la ENTREGA Y CONFIANZA, a través de una globalidad en la planificación semanal, mucho más centrados en nosotros que en los rivales

6. DINÁMICA DE ENTRENAMIENTOS SIEMPRE EN COMPETICIÓN Y PONIENDO TODA NUESTRA ENERGÍA A LA VEZ QUE VALORANDOLA, siempre superándonos en cada ejercicio, creando nexos de unión entre jugadoras y cuerpo técnico

7. DAR MUCHISIMO VALOR A LOS PEQUEÑOS ESFUERZOS EN LA PISTA, A LOS QUE NO SALEN EN LA ESTADISTICA. Esto es lo que vieron en el SCOUTING PROPIO cada vez que nos analizábamos

8. SUPERACIÓN DEL SEGUNDO MOMENTO MÁS DIFICIL haciendo un Pacto entre todos los miembros del Equipo, creando un COMPROMISO COLECTIVO TOTAL

9. En el momento decisivo de la temporada NO TRASMITIR NI UN SOLO INSTANTE DE DUDA, que el miedo no se apodere de nosotros, NO TENGO MIEDO A PERDER

10. En la última semana ser MAS EQUIPO QUE NUNCA, creyendo firmemente en nuestro plan para ganar, reforzando totalmente nuestra confianza