En primer lugar, se quiere dejar claro que el único perjudicado en esta operación es UNB Obenasa. El club ha visto cómo su entrenador, con contrato en vigor, ha aceptado la oferta de un equipo de la misma competición. El motivo por el que se le deja marchar es la buena relación personal y profesional existente.

Por otro lado, es necesario aclarar que en el contrato de Víctor Lapeña existía una cláusula por la que el entrenador debería abonar al club la parte restante de su contrato en caso de abandonar UNB Obenasa antes de tiempo, como así ha sucedido. Es el club quien libera a Víctor de pagar dicha cantidad y deja marchar al técnico sin ingresar nada.

Rubén Lorente, nuevo entrenador
En otro orden de cosas, UNB Obenasa confirma oficialmente que será Rubén Lorente quien se haga cargo del equipo. La directiva confía en este hombre de la casa para seguir la línea comenzada esta temporada. Rubén, además, seguirá ocupando el cargo de director técnico y, al frente del banquillo rosa, contará con Miguel Garrote y otro ayudante.