Nicole Powell está llamada a ser una de las grandes estrellas de la Liga Femenina. Había aterrizado hacía un par de días en Salamanca y, aunque Alberto Miranda la tuvo muchos minutos en pista, la estadounidense pasó absolutamente desapercibida hasta el final del partido. Hasta falta de un minuto y medio cuando Powell terminó anotando un triple a un solo pie desde más de siete metros en el último segundo de la posesión del Perfumerías Avenida. Era el 64-57 y el punto final a las aspiraciones de dar la sorpresa de un Uni Girona tuvo todo el partido con el corazón encogido los 3.000 espectadores que llenaban el Würzburg. El guión pasaba por una victoria del Salamanca y la Supercopa se quedó en casa (68-59), con un buen papel de la gerundense Marta Xargay y el acierto final de una jugadora con contrato temporal como Reneeka Hodges - aquí se demuestra el potencial económico de un club - pero con una no menos excelente puesta en escena de la Uni, que dio la cara hasta el cara o cruz final.

Monroe y Sarr demostraron tanto su calidad, como las relativas carencias interirors de las locales sin Adair y Renzo, porque Alberto Miranda apostó por empezar jugando con Powell de cuatro y la estrella estadounidense dejó claro que aún no había terminado de aterrizar. El Uni no estuvo acertada de fuera, pero, en cambio supo evitar que el Salamanca pudiera correr como gusta a las castellanas y bajó la producción ofensiva local alternando individuales con defensas zonales. Los verdaderos problemas llegaban cuando el Perfumerías Avenida conseguía ahogar el ataque del Uni - 27/21 con un triple de Sulciute a pocos minutos del descanso - pero entonces apareció la fina izquierda de Monroe para solucionarlo (30-29 al descanso).

A mediados del tercer cuarto, el Uni tuvo que volver más de una vez a la defensa zonal para evitar que Xargay y Fernández aprovecharan su físico para penetrar y que Hodges encontrara buenos tiros de tres y cuatro metros. Monroe y Sarr, cuando tenían suficiente aire, seguían siendo la mejor solución para anotar y un triple final de Jordana dejaba Uni dentro del partido antes de encarar el tercer cuarto. Aquí sí que Roneeka Hodges hizo daño de verdad y llegó otro de los momentos que temía Caula. Unos minutos de desequilibrio claro y el Perfumerías Avenida que iba de diez puntos. El máximo desavantge del Uni (52-42) volvió a ser secado al igual que en el primer tiempo: exhibición de clase ofensiva de Jacinta Monroe. Se llegó a un final equilibrado con, aunque no poder ir casi nunca a la línea de tiros libres (siete faltas en favores en todo el partido), el Uni se mantuvo a dos pasos del Perfumerías Avenida hasta que faltaban un par de minutos.

Llegados a este punto, Hogdes, que estaba ya absolutamente enratxada, clavó un triple de la esquina que parecía matar el partido y el título de la Supercopa para el Salamanca. Una vez más, sin embargo, el Uni se levantó y Jordana la clavaba de tres para volver a poner la diferencia a sólo cuatro puntos. (61-57). Faltaba un minuto y medio para el final y uno no hizo una mala defensa. El Salamanca se envolvió, pero el balón acabó en el último segundo de posesión en las manos de Nicole Powell, que hizo el triple desde más allá de siete metros a un solo pie. De nuevo los siete puntos de diferencia y uno ya no sería a tiempo de volver a resucitar. Pero había dado la cara hasta el final contra un equipo construido para dominar la liga y competir en Europa