Aún jugándose el ingreso en la máxima categoría del baloncesto femenino español, el Grupo Marsol Conquero no olvida sus raíces. Por las venas del equipo de Gaby Carrasco corre sangre onubense, un aporte vital que procede de la cantera del club y que toma forma en las figuras de Rocío Bartomeu, Marina Lineros y Nerea Raluy. Si para el resto del plantel luchar por el ascenso es un sueño hecho realidad, para las jugadoras ‘made in Onuba' hacerlo en Huelva es lo más parecido a habitar el paraíso. "Jugar los partidos más importantes de la historia del club y hacerlo en casa, ante nuestras familias y nuestros amigos, es lo máximo que podíamos pedir", explica Rocío Bartomeu.

Como corresponde a las nuevas exigencias de un club que ha pasado de luchar por evitar el descenso a pelear por el salto a la élite, las onubenses han tenido un protagonismo limitado durante la temporada. Rocío ha disputado 21 partidos de 28, Nerea, 13 partidos; y Marina, 9 partidos. Y ninguna de ellas destaca en ningún apartado estadístico. Aún así, saben que con su trabajo en los entrenamientos y sus ánimos en el vestuario son tan partícipes del posible ascenso como el resto de sus compañeras.

"Es verdad que no hemos tenido mucho protagonismo, pero ahora esperamos jugar cuatro partidos en cuatro días y a lo mejor tenemos más minutos. Y si no es así, a seguir como hasta ahora, entrenando a tope y animando al equipo desde el banquillo", señala Marina Lineros.

Más aún. Rocío, Marina y Nerea son el principal nexo de unión entre el equipo y la ciudad, entre la grada y la cancha. De ahí que ninguna mejor que ellas para pedir a la afición al baloncesto, en particular, y a todos los onubenses, en general, que rebosen el Andrés Estrada en los partidos del Grupo Marsol Conquero.

"La gente debe venir al pabellón porque va a ser un gran espectáculo, hay grandes equipos y grandes jugadoras. Además, necesitamos el apoyo del público para conseguir el ascenso", proclama Nerea Raluy.

Asegurado el espectáculo, sólo queda desearle la mejor de las suertes. No olvidar de dónde se viene es la mejor receta para llegar muy lejos. Las raíces onubenses del Grupo Marsol Conquero son una garantía de éxito.

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