Primera parada en la importante semana de Rivas Ecópolis para asegurar el tercer puesto. El equipo se desplaza a Vigo, donde se medirá al Celta en el partido aplazado de la jornada 22. El único objetivo para el cuadro ripense pasa por lograr la victoria en un partido que será especial, entre otros, para el técnico Miguel Méndez, quien regresa por primera vez a la que ha sido su casa durante muchos años.

Obligada victoria para Rivas Ecópolis en su visita a La Navia para medirse al Celta de Vigo, de cara a seguir dependiendo de sí mismo para asegurar el objetivo de la tercera posición al término de la fase regular. Ahora mismo el conjunto ripense se encuentra cuarto en la clasificación, con un partido menos -y una victoria menos- que Girona FC, y con los mismos guarismos que Mann Filter. El equipo de Méndez tiene ganados todos los posibles empates, por lo que cumpliendo con su parte no habrá que esperar resultados ajenos en esta recta final.

También se encuentra cerca de cumplir con su objetivo de la temporada el Celta de Vigo, que tiene el asegurar la permanencia a un paso. Con dos victorias de ventaja sobre UNB Obenasa Lacturale y el average particular ganado, la única opción de descenso pasaría por caer en todos sus partidos y que las navarras vencieran. UNB jugará dos horas antes frente a Ros Casares, por lo que es probable que el equipo que entrena Carlos Colinas ya esté incluso salvado cuando salte a la cancha para medirse a Rivas Ecópolis. Posibilidad esta que tampoco resulta especialmente positiva para el equipo de Miguel Méndez, en tanto que Celta, que cuenta con una plantilla joven y bastante talento potencial, puede convertirse en un equipo más peligroso en cuanto se vean sin la presión de tener que obtener resultados y puedan jugar al baloncesto disfrutando y sin nada que perder. Mucho ojo al crecimiento que jugadoras como Damiris Dantas o la fuerza de Aya Traoré.

Será un partido muy especial para varios miembros de Rivas Ecópolis con pasado vigués. Por supuesto, para el entrenador Miguel Méndez, que regresa por primera vez a la que es su casa tras dirigir durante una década al Celta, sentándose ahora en el banquillo rival. No podrá jugar, desafortunadamente, Iva Sliskovic, que jugó las últimas tres temporadas en el Celta, pero sí lo harán otras jugadoras con pasado gallego como Laura Nicholls o Gema García.