La Federación Española de Baloncesto se encuentra inmersa en la reconstrucción del cuerpo técnico de la selección absoluta femenina, que en los meses de junio y julio debe disputar la fase de clasificación para el Europeo del próximo año en Francia. Eliminadas de los Juegos Olímpicos y sin posibilidad de jugar el Preolímpico, la Federación se ve obligada a buscar el cambio para volver a estar en lo más alto del baloncesto femenino europeo.

En las últimas semanas la lista de candidatos se ha ido reduciendo. Los rumores apuntan hacia Salamanca y a Lucas Modelo, entrenador del Perfumerías Avenida, como uno de los técnicos con más opciones de llegar a ser seleccionador. Sin embargo, poco a poco el nombre de Carlos Colinas, entrenador del Celta femenino, está sonando cada vez con más fuerza, contando cada vez con más opciones. Su nombre salió a la palestra en el último Europeo masculino en Lituania, y desde entonces ha ganado cada vez más apoyos.

Carlos Colinas es el técnico de la Federación Española que más medallas ha conseguido con los equipos de formación de España. El actual entrenador del Celta femenino cuenta en su palmarés con tres oros en los Europeos sub 16 celebrados en Italia (2004), Polonia (2005) y Eslovaquia (2006), otro oro en el europeo sub 18 de Suecia (2009), plata en la misma categoría (Serbia 2007) y la segunda plaza en el Mundial sub 19 celebrado el pasado verano en Chile, sumando un total de seis preseas; además de un quinto puesto en el Europeo sub 18 disputado en 2008 en Eslovaquia.

En 2010, Carlos Colinas viajó a Brasil para hacerse cargo de la selección absoluta canarinha. Su primer éxito como "brasileiro", fue conquistar el Campeonato Sudamericano, acudiendo posteriormente al Mundial que se disputó en Chequia, en donde consiguieron la novena plaza. La Federación Brasileña de Baloncesto le ofreció la renovación, pero los cambios vividos en el Celta femenino, y su reciente paternidad hicieron que decidiera volver a casa.

La decisión no debe tardar demasiado tiempo, pues la competición liguera finaliza en abril, y a partir de ese momento habrá que comenzar a pensar en ese preuropeo y en el cambio que necesita la selección absoluta tras el último fracaso.

Colinas no pierde ni un minuto esperando la noticia desde la Federación, ya que ahora más que nunca está centrado en el Celta femenino y en los importantes partidos que le esperan al club vigués en esta segunda vuelta del campeonato, en donde se juega su futuro en la competición. Un futuro que está encaminado pero que necesita el empujón final para que sea una realidad