Kim Butler, jugadora del Palacio de Congresos, aterrizó en la isla el pasado 20 de enero y desde entonces ha disputado dos encuentros con el plantel de Santa Eulària. Dice que se está adaptando «muy bien» al grupo que entrena Miguel Ángel Ortega y se siente «agradecida» al club por darle la oportunidad de volver a jugar en la Liga Femenina. Además, no descarta al PDV para jugar el play off.

—¿Qué le decidió a aceptar la oferta del Palacio?

—Acepté la oferta del PDV porque quería volver a jugar en la competitiva Liga Femenina. La profesionalidad y la excelente reputación del club fueron factores que también influyeron en mi decisión. El hecho de conocer a varias jugadoras y escuchar cómo tienen en alta estima al entrenador también ayudó a que firmara. 

—¿Qué es lo que más le ha gustado y lo que menos de su llegada al club?

—Estoy muy feliz de estar aquí representando a un club muy respetable. Es un alivio recibir tanto apoyo y cariño de los fans y también de la comunidad del baloncesto. Aprender todos los nuevos planes y 'sincronizarse' con el entrenador y otras jugadoras puede resultar un tanto agobiante, especialmente porque ellos llevan trabajando juntos desde septiembre. Aún así, cada día me siento más cómoda.

—Usted ya conocía a Paula Seguí y Shona Thorburn de haber coincidido con ellas en León, pero ¿qué opina del resto de sus compañeras?

—Hay un gran ambiente en el equipo porque todas nos respetamos las unas a las otras. También compartimos una férrea ética de trabajo como conjunto y eso ayuda a que haya una buena química en la pista. Somos conscientes de que no tenemos una plantilla muy amplia y a veces somos menos de diez en los entrenamientos, por lo tanto es importante mantenernos unidas y confiar en que todas las jugadoras están haciendo su trabajo y contribuyendo para mejorar el equipo.

—¿Piensa que el equipo está preparado para luchar por el 'play off' o solo es necesario pensar en una plaza europea?

—Esa es otra de las razones por las que vine, por formar parte de algo especial. Dice mucho del equipo cuando se enfrenta a la adversidad o a no ser favorito y aún así encuentran maneras de tener éxito en una Liga con tanto talento. Este equipo tiene mucho carácter y tenemos como meta llegar a los puestos de play off. El pez pequeño también se puede comer al grande. 

—¿Qué opina sobre su entrenador? ¿Le gusta su forma de trabajar?

—En las pocas semanas que llevo aquí hemos trabajado realmente duro. Los entrenamientos son intensos y focalizados en un propósito. Miguel es un entrenador con mucha experiencia y vive dedicado al equipo. Respeto su conocimiento del juego y su esfuerzo para hacer de este un club exitoso. Su intensidad y su pasión son contagiosas y eso es una gran motivación para sus jugadoras.

—Usted tiene contrato hasta final de temporada. ¿Le gustaría continuar una campaña más en el PDV?

—Sería una gran oportunidad jugar toda una temporada en el Palacio. Creo que se están poniendo los cimientos de un club muy exitoso en el futuro. Cuanto más tiempo jueguen entre ellas las jugadoras, más se sintonizan. Es claramente una opción y espero que las cosas funcionen. 

—En Girona fue la mejor jugadora del equipo ibicenco. ¿Su adaptación al equipo está siendo más rápida de lo esperado?

—Todo el mundo ha sido realmente paciente y me ha apoyado muchísimo a la hora de ajustarme al equipo. Intento adaptarme y ejecutar lo que el entrenador me ha pedido lo más rápido posible para beneficiar al equipo. Va a llevar su tiempo que todo el mundo se sienta completamente a gusto pero estoy segura de que estaremos aún más cohesionadas pronto. 

—El próximo sábado el Ros Casares visita Santa Eulària. ¿Cree que se puede dar la sorpresa y batirle?

—El Ros es uno de los mejores equipos de Europa. Tienen una lista de jugadoras con gran experiencia y estrellas conocidas que no están acostumbradas a perder. Pero puede pasar de todo en cualquier partido. Cada semana vemos a un equipo distinto batiendo a otro, esa es la belleza de la Liga. Es extremadamente competitiva, cada semana. Soy optimista y entro a cada partido con la intención de ganar.