Se acabaron las dudas y los miedos. Pabellón y Carmelitas se centrarán lo que resta de Liga en mostrar la mejor imagen posible y en preparar ya el proyecto de la próxima temporada. La Federación decidió que esta temporada no habrá descensos en la Liga Femenina 2 lo que condicionará la segunda mitad de la temporada.
"Es lo que hay" comenta el entrenador del Codigalco Carmelitas, Juán Rodríguez. "Van a ser tres meses complicados para poder motivar a nuestras jugadoras pero las más interesadas en hacerlo bien son ellas. Por lo menos te ahorras jugar una fase de descenso aunque con los últimos fichajes creo que tenemos equipo para evitarla deportivamente", añade.
Su colega en el banquillo del Pabellón, Lisardo Rodríguez, va en la misma línea: 'A nivel competitivo te quita la presión pero como profesionales que somos tenemos que responder como tales. Por un lado es algo lógico porque estos años anteriores te gastabas un dinero en la fase de descenso y luego si querías seguías igual en la Liga. Por otro lado jugar abajo sin presión puede hacer que la gente se deje ir o también que juegues mejor a no tener esa presión encima. Es como si estuvieses toda la temporada en mitad de tabla sin poder ir ni para arriba ni para abajo'.
CARAS NUEVAS
Los esfuerzos de ambos clubes por reforzar sus plantillas durante el parón navideño pierde ahora importancia. La base Reshea Brisol debutó con el pabellón en Burgos (72-57). 'Es una jugadora muy lista y con mucha experiencia. Es una líder y que hace mejores a las demás compañeras', asegura Lisardo Rodríguez.
En el Carmelitas se estrenaron Zuleida Atíes y Anete Horelika en la derrota del Carmelitas en Pontevedra ante el Arxil (65-51): 'Acabei o partido cabreado pero cosa sensación de que son duas xogadora que nos van axudar moito', comenta el técnico colegial.
Mañana los dos equipos ourensano competirán por los aficionados de la ciudad. A las 19,30 el Carmelitas recibirá en el Vedruna al Ensino de Manel Sánchez y media hora más tarde comenzará en Os Remedios el partido entre el Pabellón y uno de los clásicos de la categoría, el ADBA de Avilés.
LA REGIÓN