La expedición del Palacio de Congresos sufrió en sus carnes el caos que provocó la huelga de los controladores aéreos en casi toda España. La plantilla del conjunto de Santa Eulària no pudo viajar a Vilagarcía de Arousa para jugar el partido frente a Extrugasa, programado para hoy, a las 19 horas. Jugadoras y técnicos quedaron atrapados en el aeropuerto de Madrid-Barajas desde las 15.30 horas de ayer y, como consecuencia del bloqueo aéreo, no pudieron coger el avión que les llevaba hasta Vigo para partir desde allí en autobús hasta la ciudad del partido.

La directiva del club estuvo barajando diferentes alternativas para llegar a la hora del encuentro pero fue materialmente imposible, por lo que tras distintas conversaciones con Mercedes Iborra, responsable de la Liga Femenina de la Federación Española de Baloncesto, y también con los dirigentes del Extrugasa se decidió que esta tarde no podía jugarse el encuentro. 

Hoy se sabrá si se juega mañana o si, por el contrario, se aplaza a otro día. Las opciones que estuvo barajando el PDV pasaron por viajar en autobús hoy por la mañana, pero como la distancia entre Madrid y Vilagarcía supone unas siete horas de carretera, llegarían con el tiempo justo para jugar. Otra alternativa fue buscar vehículos de alquiler para salir ayer por la tarde, pero tampoco se tomó esta decisión por el mal estado de las carreteras por la nieve. Una última alternativa, que será la que probablemente se adopte si se juega mañana, es la de viajar en autobús hasta tierras gallegas, llegar esta noche y jugar mañana a mediodía. 

Mientras tanto, las jugadora y técnicos estuvieron esperando en el aeropuerto madrileño desde las 15.30 horas hasta las 23, ya que tuvieron que esperar a recuperar sus maletas, que no llegaron hasta pasadas las 22.30 horas. De allí se fueron al hotel para descansar y cenar. Por tanto, el choque en la pista del conjunto pontevedrés quedará en la memoria de la expedición del Palacio, que ya vivió una odisea peor que la de ayer cuando, el 9 de enero de 2010 se quedaron aislados en Ucrania tras el encuentro de Eurocup Women ante el Dnipro. Entonces tuvieron que estar cinco días en tierras ucranianas porque la nieve clausuró los aeropuertos de aquella zona de Europa