El RC Celta Indepo no frenó a un Ciudad Ros Casares (94-75) que aprovecha la derrota del Mann Filter Zaragoza en Salamanca y se sitúa como líder de la Liga Femenina en solitario. El equipo valenciano superó a un buen equipo, bien arropado por una Fonteta con ganas de estar al lado de sus jugadoras. La puntería desde la línea de 6,25 (12 triples con un 63%) fue letal para asegurar la quinta victoria en la competición doméstica

Jana Veselá  (14 puntos, 6 rebotes, 5 asistencias y 4 robos para 26 de valoración), Laia Palau (12 tantos y 6 asistencias para 26 de valoración) y Belinda Snell (anotó los cuatro primeros triples que intentó para 16 puntos) fueron algunas de las protagonistas de un encuentro en el que volvió a ser baja Amaya Valdemoro

El partido arrancó con un triple de Belinde Snell, que formó parte de un cinco inicial en el que también estuvieron Elisa Aguilar, Jana Veselá, DeLisha Milton-Jones y Erika de Souza. La escolta australiana anotó los tres triples que intentó en el primer cuarto. Arrancó bien el equipo valenciano (5-0), aunque pronto se vio superado en el marcador (7-9) por un acertado conjunto gallego. Un 10-0 de parcial le dio la vuelta al resultado de un cuarto que concluyó con 22-14.

Entre el final del primer cuarto y el inicio del segundo cuarto, el parcial fue de 14-0, lo suficiente como para encarrilar el partido para el líder de la Liga Femenina. Cuando el resultado fue de 31-16, Miguel Méndez solicitó tiempo muerto. Apenas unos segundos más tarde Gina Palunsa debutó en la Liga Femenina. Erró sus dos primeros lanzamientos, pero acertó en los dos siguientes.

DeLisha Milton-Jones falló más tiros de los que acostumbre y entre Laia Palau y Jana Veselá adoptaron el papel de protagonistas. La primera aportó ritmo y asistencias. La segunda, puntos, rebotes y defensa. Al descanso, 46-29.

El RC Celta Indepo anotó en sus primeros cuatro ataques tras el descanso, pero no logró acercarse en exceso a un Ciudad Ros Casares que siguió  sumando con asiduidad. Logró, eso sí, el equipo gallego rebajar la barrera psicológica de los 10 puntos (56-47) tras un triple de Noemí Jordana, que se mostró acertada desde el perímetro en su vuelta a la Fonteta. Una mejoría en la intensidad defensiva alejó de nuevo al rival. El tercer cuarto concluyó con el resultado de 70-54.

Las múltiples faltas personales con las que Ciudad Ros Casares fue penalizado no dañaron en exceso a un equipo con banquillo suficiente como para repartir minutos entre sus jugadoras. El equipo valenciano anotó 24 puntos en el último cuarto para no dar opciones al rival. Al final, 94-75.

"Hemos tenido minutos buenos, pero no ha sido un partido especialmente regular. El RC Celta Indepo me ha parecido un buen equipo, pero nosotros no podemos salirnos del partido", opina Isma Cantó. "Después del partido del miércoles, ya sabíamos que este encuentro sería especial, diferente. Al final, hemos acabado bien, anotando 94 puntos", dice Laia Palau.

Ciudad Ros Casares regresa este lunes a los entrenamientos, antes de viajar el martes a Lituania, donde el miércoles se enfrentará (17.45 horas, Punt 2) al TEO Vilnius en la segunda jornada de la Euroliga.

CONSIGUE TU FIRMA... Laia Palau

Ciudad Ros Casares puso en marcha este sábado una iniciativa a través de la cual los aficionados podrán coleccionar los autógrafos de todas las jugadoras del equipo. Laia Palau fue la primera en participar en esta iniciativa. Los hinchas que desearon la firma de la base acudieron 15 minutos después de la finalización del partido a una mesa habilitada a tal efecto con el folleto del día, donde aparece una fotografía de Laia Palau y un espacio reservado para su firma

Álex Gozalbo
C. ROS CASARES

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EL CELTA CONSERVA SU ORGULLO

El Celta Indepo vendió cara su derrota. El Ros se tuvo que esforzar al máximo para vencer a un equipo vigués que no juega competición europea como el TT Riga, al que el conjunto valenciano había derrotado esta semana por 80 puntos de diferencia. Ni el equipo local tuvo un mal día, cosa poco probable, ni el conjunto céltico estuvo espléndido tanto en defensa como en ataque. El Ros hizo un 63% en tiros de tres y un 91% en tiros libres, por un 36% en tiros de tres y un 53% en tiros libres del conjunto vigués, y así es muy difícil ganar al Ros.

Pese a todo, el Celta Indepo estuvo dentro el partido durante tres de los parciales. El Ros solamente se pudo relajar en los diez minutos finales, cuando al equipo de Miguel Méndez le faltó fuelle para seguir jugando a un ritmo tan endiablado.

Los dos equipos comenzaron peleados con el aro rival. El Celta Indepo estaba bien en defensa y obligaba al conjunto valenciano a jugársela desde la línea de 6.25. Las viguesas incluso se pusieron por delante en el marcador (7-9). Sin embargo, las valencianas corrigieron el punto de mira y ahí comenzó el despegue local, con un parcial de 12-0.

El descanso entre el primer y segundo cuarto no le vino bien al conjunto vigués, que vio cómo el Ros ampliaba cada vez más la diferencia, sin que fueran capaces de ver aro. En los siete primeros minutos de juego el Celta Indepo solamente anotó cuatro puntos. Un cambio defensivo a zona de las viguesas sirvió para cortar la sangría anotadora del Ros, permitiendo robar varios balones para salir a la contra.

El Celta Indepo mejoró a la salida de los vestuarios. La defensa se cerró más y se impidió el juego ofensivo local. En ataque los porcentajes de tiro mejoraron mucho. El cuadro celeste se colocaba a nueve puntos (56-47) con lo que se comenzaba a pensar en el milagro. La alegría duró muy poco, ya que una triple de Milton Jones y una canasta de dos de Vesela devolvieron las cosas a su sitio.

El último cuarto se jugó sin complejos. Los dos equipos se olvidaron de las defensas y solamente pensaron en ataque, y en esos casos quien más tiene que ganar es el conjunto valenciano, que consiguió sobrepasar los veinte puntos de diferencia.

Al final, digno partido del Celta Indepo, que a pesar de no estar acertado en el tiro en los dos primeros cuartos aguantó el tipo y mantuvo opciones hasta el tercero. Más que la mayoría

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