Aitor y Guillermo de Fiebre Taronja, nos cuentan su visión del próximo europeo que se celebra en Turquía. De momento nos hablan del GRUPO A. GRUPO A REPÚBLICA CHECA Las checas viajan a Turquía con la única intención de subir un escalón en el podio y llevarse la medalla de oro que perdieron hace dos años. Para ello, el seleccionador Jan Bobrovsky ha escogido a lo mejor de los tres grandes del baloncesto checo para confeccionar el combinado: cinco jugadoras del Gambrinus, tres del Loko Trutnov y dos del Blex Praha, rival de Ros Casares en Euroliga. La dirección de juego estará en manos de la joven Michaela Uhrova, que tendrá la difícil papeleta de suplir la ausencia de la mejor pasadora de los juegos olímpicos de Atenas, Romana Hamzova. En el puesto de base, la aportación de Irena Borecka es una incógnita. La anotación en posiciones exteriores es tarea de Hana Machova y Marketa Makrosova. La primera es una jugadora completa, con mucha raza, capacidad defensiva y siempre aporta lo que se precisa en cada momento, mientras que Makrosova ha destacado este año con un gran porcentaje en el lanzamiento de tres. El resto de la plantilla, excepto la excelente reboteadora Zuzana Klimesova(1,87), supera el 1.90 de estatura, lo que permite a las checas jugar con aleros muy altas y a menudo incluso con un triple poste. La torre del equipo es Petra Kulichova, que desde sus casi dos metros siempre roza el 20-10 en su estadística y anota con porcentajes cercanos al 70 por ciento. Jana Vesela puede jugar al tres pese a sus 195 centímetros, es una excelente defensora, roba numerosos balones con sus largos brazos y anota dos de cada tres triples que lanza. Eva Viteckova es también una alero alta, mejor anotadora que Vesela pero con menos aptitudes defensivas. Ivana Vecerova es una cinco rocosa, luchadora y con buenas maneras para cerrar el rebote. Además este Europeo supone el regreso al conjunto checo de la veterana Eva Nemcova, que vuelve después de seis años de ausencia en el combinado nacional tras una buena temporada en Parma. Michala Hartigova y Michaela Pavlichova completan el juego interior y la selección. Excelentes mimbres para tratar de asaltar el trono ruso. FRANCIA La selección gala desea volver a entrar en las semifinales después de haber quedado en la mejor posición de los perdedores de cuartos, la quinta. El seleccionador Alain Jardel ha extraído la columna vertebral de la propia liga francesa, elaborando una selección completa, con bases que hacen jugar, exteriores con muñecas casi siempre acertadas e interiores dotadas de una gran potencia física. El timón estará en manos de dos bases pequeñitas, veloces y de enorme visión de juego. Céline Dumerc con sus 23 años ya es la jefa del Bourges y ha destacado tanto en la liga particular como en la Euroliga. Caroline Koechlin se ha ganado su presencia con las blues después anotar diez puntos y dar más de seis asistencias con el Mondeville. Audrey Sauret Gillespie tiene todas las papeletas para ocupar un puesto exterior, anota casi la mitad de sus triples y no suele temblarle la muñeca en los momentos difíciles. Su buena temporada la ha llevado a dejarse tentar por el dinero ruso y dejar su país. Manu Hermouet es una vieja conocida del baloncesto español, buena anotadora y excelente revulsivo desde el banquillo para cambiar el ritmo de partido con sus lanzamientos. Emilie Gomis lo tendrá algo más complicado para obtener minutos, pero su buena condición física le puede granjear minutos a la hora de defender a las escoltas altas del rival. En la posición de alero, la jugadora del Valenciennes Sandra le Drean impondrá su calidad para ser decisiva. Anota con fluidez, rebotea gracias a su 1.86, tira de tres con porcentajes por encima del 40% y ha alcanzado una madurez deportiva que la convierte en una de las líderes de esta selección. La veterana Catherine Melain aportará su saber hacer y su experiencia en los momentos que tenga que aparecer en la pista. La pareja interior podría ser perfectamente la formada por las dos jugadoras de la Liga Femenina española, Nicole Antibe y Sandra Dijon. El flamante fichaje del Ros Casares se encuentra en un excelente momento, posee experiencia en grandes citas y puede responder a cualquier exigencia del entrenador. Dijon hará las delicias de los aficionados del Puig d ‘en Valls con su 195 de estatura durante la próxima temporada. La joven Elodie Godin ha dejado a sus 20 años de ser una promesa para ser una completa realidad. Potente, rebotea como si le fuese la vida en ello y anota bastantes segundas opciones. La experimentada Nathalie Ledesma y la poderosa Emmeline Ndongue tratarán de tapar en la rotación el hueco dejado por Lucienne Berthieu tras anunciar ésta su retirada. LETONIA Las bálticas llegan a Turquía con el complicado deseo de pasar la primera fase, algo que tendrán bastante caro aunque no imposible. En la fase de clasificación dejaron fuera a Croacia , Eslovaquia y Ucrania. No estuvieron en la cita de hace dos años en Grecia y no se clasificaban para un Europeo desde 1999, donde fueron novenas. Las letonas forman un bloque compacto, poderoso fisicamente pero con pocas jugadoras de proyección internacional y no demasiadas que destaquen en la liga báltica. La gran estrella es la alero Gunta Basko. Juega en el Tarbes de la poderosa liga francesa y ha promediado 23 puntos y más de diez rebotes en la fase de clasificación. La otra jugadora de este combinado es la pívot de 1.93 Ieva Kublina, que milita en el Lietuvos Telekomas. Más de veinte puntos de media para una mujer en plena progresión a sus 23 años y que ya ha tenido experiencia en la WNBA. Dentro de la propia liga letona destacan dos exteriores. La primera es la alero Ieva Tare, máxima anotadora de la liga de su país con el TTT Riga. La joven escolta Anete Jekasbson ya es a sus 22 años la líder del Klondaika. Otros de los nombres a destacar son el de la base Ilze Ose- Hlebovicka, el motor de este equipo; y el de la jovencísima alero Elina Zike, una ametralladora que en sus pocos minutos en pista ha anotado con porcentajes del 75% desde más allá del arco de tres puntos. El resto de la plantilla no tiene demasiada proyección, son jugadoras de equipo que aportan descanso y pelea en defensa, pero el destino de las bálticas estará en manos de las jugadoras citadas arriba. Fiebre Taronja |