La plantilla del Extrugasa se negó a aceptar
una sanción económica por parte de la directiva por bajo rendimiento
tras el partido que midió la pasada semana al equipo vilagarciano y al
Perfumerías Avenida Salamanca en Fontecarmoa, en el que se consumó el
descenso de categoría

Todavía tratando de asimilar la decepción de un
partido perdido en la prórroga ante el subcampeón de Europa que supone
la pérdida de la categoría, las jugadoras del Extrugasa recibieron el
pasado miércoles, según explican, la visita en el vestuario de varios
directivos que portaban unos escritos donde se estipulaba una sanción
económica a cada una de ellas por bajo rendimiento y una cláusula en la
que recibirían la cuantía adeudada por el club, correspondiente a sus
emolumentos, en el mes de septiembre. Ninguna de las jugadoras, tras
leer el escrito, optó por firmar en conformidad con lo estipulado por
la directiva. Mientras que algunas mostraron su sorpresa y su enfado
por el momento en el que los dirigentes decidieron dirigirse a ellas
para comunicarles estas cuestiones, otras entendían la postura de la
directiva. Ese es el caso de
Sara Gómez, que el lunes reconocía que
"
ellos han trabajo duro y es normal que estén decepcionados, como
todos".
Las jugadoras del Extrugasa remitieron a los directivos a
discutir cualquier tipo de matiz económico con sus respectivos agentes,
eludiendo cualquier tipo enfrentamiento personal.
La crisis
económica y la mala actuación deportiva han mermado la capacidad de
generación de recursos del club este año, por lo que ahora los
directivos tendrán que realizar un esfuerzo extra para conseguir
recursos con los que saldar los contratos con las jugadoras y a la vez
empezar a elaborar un presupuesto para la Liga Femenina 2.
Aunque
las jugadoras prefieren guardar silencio acerca de su futuro, como es
el caso de la propia Sara Gómez, quién reconocía que "ahora quiero
desconectar, ya habrá tiempo para pensar donde voy a jugar el próximo
año", lo cierto es que todo indica que el Extrugasa sufrirá una
profunda remodelación en su plantilla la próxima temporada tras un año
en el que los dirigentes dieron prioridad al aspecto económico debido a
las previsiones de crisis que afectaban a la generación de recursos, y
en el que la fortuna con los fichajes fue esquiva desde el primer mes
de liga, obligando al club a realizar numerosos cambios que finalmente
no fueron suficientes para continuar en la máxima categoría nacional.
diariodearousa.com