Si el primer día de la temporada, cuando el Feve San José pisó la cancha del Ros Casares en la Supercopa y recibió un repaso en toda regla, alguien hubiera dicho que iba a jugar el ‘playoff' por el título lo más normal es que le hubieran tomado por loco. Si después de perder claramente en Olesa el primer partido de liga hubiera insistido en su vaticinio, le habrían dado medicación y si después de la séptima jornada, superado el ecuador de la primera vuelta, con el equipo de Estrada colista y con un solo triunfo, ese mismo vaticinador optimista hubiera insistido en que el Feve San José iba a acabar jugando por el título, instalado en la cuarta plaza, se podría haber hecho rico en cualquiera de los portales de apuestas que hay en Internet.

Entonces se habrían reído de él, pero ahora sería él quien se carcajearía. Aquel equipo errático, que apenas ha tenido una semana tranquila en esta temporada, ha ido creciendo. Miguel Ángel Estrada había dado forma a una plantilla con mucho riesgo. Es cierto que tenía tres internacionales españolas, pero por el resto de las nacionales no apostaba nadie. Con una sola extracomunitaria desde la jornada ocho, el equipo leonés ha demostrado que la fe mueve montañas y eso ha sido lo que ha movido a este equipo que en las últimas 20 jornadas del campeonato logró ganar 16 partidos. Salvo el Ros Casares nadie fue mejor que el equipo que preside Enrique Gil.



Los problemas económicos por la falta de liquidez del club que apunto estuvieron en desembocar en una huelga esta semana pasada han sido lo único que puede ensombrecer un año para enmarcar y que si se escucha a alguna de las jugadoras de la plantilla leonesa, como Cindy Lima, aún no hay que dar por concluida. "Somos tan ‘flipadillas' que cuando acabó el partido contra el Cadí y nos aseguramos la cuarta plaza nos juntamos en el centro del campo y empezamos a gritar: ‘Ahora a por el Ros, ahora a por el Ros', aunque sabemos que no va a ser fácil, pero creo que podemos darle guerra al Ros y no renunciamos a ganar uno de los partidos, lo de pasar la eliminatoria hay que tener los pies en el suelo, ellas no han perdido dos partidos seguidos en toda la temporada, ni siquiera en la Euroliga, así que sabemos contra quien nos enfrentamos", señala la pívot catalana.



Para Cindy Lima el secreto de los éxitos del Feve San José en esta temporada no son diferentes de los que ve cualquiera de los aficionados que han seguido de cerca al equipo este año. "Somos un equipo con mayúsculas. Otros equipos se hunden con dos derrotas y nosotras hemos cerrado filas cuando nadie apostaba por nosotras y ya se escuchaba que éramos el peor equipo y que íbamos a descender. Nosotras nos unimos aún más y como somos tan ‘flipadillas' ni siquiera la complicada situación económica que hemos atravesado nos ha afectado. Nos uníamos todavía más ynos decíamos: ‘Venga chicas, por orgullo, por nosotras' y seguíamos sacando partidos adelante. Ése fue nuestro secreto. Fuimos creciendo, empezamos a ganar y tuvimos la suerte de que Shay Murphy estuvo espectacular en aquellos meses de finales de 2008. Fue un lujo para el equipo y después de muchos esfuerzos ahora estamos pensando en el ‘playoff' por el título", aseguraba Cindy Lima que se alegraba de que la semana hubiera acabado con una alegría después de unos días que calificaba como "los más complicados de mi carrera porque ha sido una situación desagradable para todos. Yo deseo no volver a verme en una situación como la que hemos vivido", afirmaba la pívot de la selección española en un tono conciliador "porque no se trata de buscar malos de la película. Yo sé que Enrique Gil no quería que el club estuviera en esta situación y que la solución no depende de él, pero también hay que entender nuestra inquietud", remata Cindy Lima que volverá la próxima semana con sus compañeras a Valencia, adonde empezó la aventura de la temporada, aunque con sensaciones muy diferentes... y mejores.



LAS ZAPATILLAS MÁGICAS DE CINDY LIMA

Fue en Ibiza, en vísperas del partido que el equipo leonés tenía que jugar contra el PDV Santa Eulalia de la Eurocopa que valió la clasificación de las leonesas para los cuartos de final de la competición continental. En el entrenamiento previo al encuentro, Cindy Lima rompió sus zapatillas. No pasaba nada. Malo sería que en las tiendas de Santa Eulalia no hubiera un 46 desparramado con el que jugar esa tarde. Al partido apareció con unas zapatillas color burdeos brillantes. Las bromas de sus compañeras sobre lo bonitas o feas que eran las zapatillas abundaron aquel día. Después del triunfo y la clasificación para el ‘playoff' por el título, Cindy Lima pasó facturas con su buen humor habitual. "Os reíais de mis zapatillas, pero desde que las estrené hemos ganado todos los partidos de liga. Mis zapatillas no conocen la derrota. Esta es el verdadero secreto de nuestra clasificación para el ‘playoff' por el título", aseguraba..


César F. Buitrón
la-cronica.net