Estados Unidos venció por una diferencia de 36 puntos a Nueva Zelanda
en el último choque de la primera fase. El cuadro norteamericano, que
cuenta sus partidos por victorias, se valió de un gran segundo cuarto
(27-6) para arrollar a su oponente
La selección de los Estados Unidos cubrió el último partido de la
primera fase sin preocupaciones porque tenía asegurada la primera fase
y todos los cruces de cuartos estaban decididos de antemano. Con un
instinto aniquilador en el segundo cuarto, dejó a Nueva Zelanda sin
anotar en los últimos siete minutos del periodo.
Las estadounidenses marcaron una máxima diferencia de 38 puntos
(38-76), ya casi al final del encuentro, pero el punto culminante del
conjunto de
Anne Donovan discurrió
entre el minuto trece y el final del segundo corte. Tras la
correspondiente reivindicación de orgullo de las de Nueva Zelanda, el
parcial pasó de 22-31 a un abultado 24-50 en sólo siete minutos, los
que restaban hasta el intervalo.
Las norteamericanas pusieron la directa y ya no aflojaron hasta el
final, pero el partido careció de mayor historia por la diferencia de
potencial y porque, desde el choque anterior, todo el torneo olímpico
estaba ya pendiente de las eliminatorias de cuartos.
Angela Marino lideró al conjunto oceánico con diecisiete puntos, dos por encima de la máxima realizadora estadounidense,
Tina Thompson,
pero las americanas volvieron a demostrar un gran equilibrio, muchas
formas de producir en ataque y una panoplia de jugadores que nadie duda
van a llevarse el oro.
EFE