La mejor jugadora española de la historia, Amaya Valdemoro, es el carisma y el corazón de la selección española femenina. La alero madrileña llega a la cita olímpica en uno de sus mejores momentos de forma y de juego de su trayectoria y, sin duda, será el motor de la selección. Este año regresa a la Liga Femenina española con el Ros Casares. Las últimas tres temporadas las ha jugado lejos de España, en la Liga Rusa, ¿cómo siente la llamada de la selección cada verano y en concreto éste con la lucha por disputar unos Juegos Olímpicos? Las tres temporadas que he estado en Rusia, venir a la selección para mí ha sido un desahogo enorme porque la Liga Rusa es muy diferente. Allí están las mejores jugadoras del Mundo, hay convocatorias para los partidos y es difícil disfrutar cada partido. Para mí cada año ha sido una satisfacción enorme venir con la selección, pero no sólo cuando he estado en Rusia, sino también cuando he estado en el Ros o en Salamanca. Para todas, la selección es como un equipo, convivimos juntas, somos amigas y encima estamos logrando medallas y eso ha hecho que todas y cada una de nosotras, durante la Liga, hemos tenido en mente esta cita.
Esta selección genera mucha expectación, a la espléndida generación del 76 que lidera se le ha sumado este año la del 89, ¿cómo está resultando la combinación? A las más jóvenes yo les saco 13 años de diferencia y eso, quieras que no, se nota. Pero esta generación tiene un talento increíble, mucho desparpajo y se están acoplando muy bien al equipo y nos está dando vidilla tanto dentro como fuera. Ojalá estas chicas, cuando nosotras nos retiremos, puedan seguir dando éxitos al baloncesto español como lo han hecho en categorías inferiores. Ahora, nosotras lo que tenemos que hacer es ayudarlas a que el paso de júnior a senior sea lo más fácil posible para ellas porque hay una diferencia muy grande. El talento que ellas tienen hay que unirlo a muchas otras cosas, el equipo, el grupo humano, las ganas la intensidad y la ambición que se tenga. Las diferencias entre ambas son claras, el talento que tienen no lo tenemos nosotras, la generación del 76 no somos muy altas, somos más fuertes, ellas son muy estilizadas, tienen altura, mucha imaginación dentro de la pista, son creativas... a nosotras quizás es la garra lo que más nos define.
En los partidos de preparación has demostrado estar en un momento mágico de juego y de forma, ¿a qué se debe? Yo creo que son las ganas. Cuando estoy motivada salgo a morir a la cancha, pero está claro que sin la ayuda de mis compañeras yo no podría sobresalir tanto ni ganar un partido yo sola. Puedo meter muchos puntos pero son ellas las que me buscan,
FEB |